El pasado 28 de Octubre del 2015, bajo el nubloso manto otoñal de la ciudad de Cuernavaca, Morelos, tuvo lugar un acontecimiento que llenó de felicidad a los miembros de la comunidad Daoísta.
Alrededor de las 9 horas del día se dieron cita en las instalaciones del Instituto Daoísta para la Salud, A.C. más de 150 personas para celebrar y participar de la apertura de un nuevo recinto al que podrán acudir a celebrar sus encuentros con los maestros y guías espirituales: El templo de la Eterna Primavera, México长春观 chǎngchūn guān.
La maestra 吴诚
真方丈 (Wú Chéngzhēn fāngzhàng), lideresa espiritual del daoísmo a nivel mundial y abad del templo 長春觀 en la ciudad de Wǔhàn shì 武汉市capital de la provincia de Húběi 湖北 viajó desde aquel lejano lugar para presidir la ceremonia, al que asistieron adultos y niños, quienes estuvieron atentos a las actividades realizadas dentro del templo.
Los líderes de la ceremonia, entre los que se encontraron, la abadesa 吴诚真方丈 (Wú Chéngzhēn fāngzhàng), el Maestro 杨振兴道長 (Yáng Zhènxīng 
Dàozháng), la sacerdotisa 喻丽萍道長 (Yùlìpíng Dàozháng), la Sacerdotisa 景秀道長 (Jǐng
xiù Dàozháng) y el Maestro 景威道長 (Jĭng wēi Dàozháng) elevaron sus oraciones al cielo, pidiendo al mismo que derramará bendiciones sobre todos los presentes y sus familias, además de las instalaciones que han sido utilizadas ya con un fin espiritual y de cuidado a la salud de los comunidad y los pacientes que acuden con regularidad a las mismas.
En el marco de una celebración tradicional daoísta, se llevaron a cabo rituales y actividades de rigor para inscribir el nombre del Templo en el Cielo, además del de su nuevo Abad, 景威道長 (Jĭng wēi Dàozháng), quien a partir de la fecha quedó al frente del mismo, responsable de difundir la filosofía Daoísta en México.
Después de los cantos y oraciones en el lenguaje original de la cultura china, y en conjunto con la ceremonia de apertura, se entronizó también una imagen de uno de los Maestros de la Medicina Daoísta, Yào wáng 药王Dios de la medicina (siendo médico durante la dinastía Táng唐 [618-907] el maestro daoísta Sūnsīmiǎo 孙思邈, quien permanecerá como uno de los protectores del cielo presentes en el lugar.
Finalmente, bajo una fina lluvia constante pero llena de nobleza y bendición, todos los presentes en forma organizada presentaron sus respetos y ofrecieron incienso y otras prendas ante los distintos altares, recibiendo en ocasiones algún objeto sagrado utilizado en la ceremonia a manos de la Abadesa 吴诚真方丈 (Wú Chéngzhēn fāngzhàng), quien nunca dejó de lucir una hermosa sonrisa en su rostro ni de expresar su felicidad a los presentes.
Al finalizar la ceremonia hubo un convivio entre los asistentes con la degustación de bocadillos.