Consejos para mantenerse saludable, según la medicina daoista, este año del gallo de fuego. Parte 2

Por Jǐng Wēi Dàozháng  景威道长

Observar nuestras manos.

Al observar nuestras manos, podemos encontrar signos inusuales como una articulación más inflamada, un nudillo enrojecido, avisándonos de posibles bloqueos, algunas manifestaciones son el reflejo de una enfermedad pulmonar grave.

  • Si el crecimiento de las uñas es le
    nto, que estas últimas se ponen
  • amarillas y gruesas, esto refleja un bloqueo en el sistema linfático.
  • Si las venas que se localizan sobre el dorso de las manos, resaltan mucho y que este proceso aumenta con la edad entonces es posible que la persona presente una patología cardiaca.

  • Si la palma de la mano presenta un enrojecimiento inusual entonces puede ser relacionado con un problema hepático, así como una posible endocrinopatía.

  • Al encontrarse nervioso o sobrexcitado, nuestras palmas sudan profusamente entonces puede haber un problema con nuestra glándula tiroides.

  • Si uno se encuentra nervioso, con las manos temblorosas o irritable todo el tiempo, puede ser una indicación de que tu glándula tiroidea produce demasiadas hormonas, y que tu metabolismo está trabajando a una gran velocidad. También puede ser síntomas de una enfermedad de Parkinson.

Señales de advertencia a través de los ojos.

  • Los ojos borrosos, las comisuras de los ojos secas y ásperas, una disminución de la visión refleja una debilidad de la función hepática. Una auto palpación de la zona hepática permite saber si hay inflamación, visitar un médico para diagnosticar nuestro hígado, conservar una buena disciplina alimenticia, nunca descuidar un cansancio de la vista.

  • Si hay dolor en los ojos, además de una fatiga ocular crónica, es importante vigilar nuestra presión ocular porque podemos presentar glaucoma. Los adultos mayores tienen que cuidarse más por estos síntomas.

Zumbidos y molestias auriculares.

  • El zumbido en los oídos puede ser vacío, como un sonido en el interior de una concha, es señal de una pérdida progresiva de la función renal, es a veces acompañado de dolores de piernas, dolor de espalda y micciones frecuentes. Es muy importante no agotarse en el trabajo o en la casa, también pueden presentarse preocupaciones o emociones que minan el buen funcionamiento de nuestros riñones. Por lo mismo, es fundamental mantener un buen equilibrio mental y físico para conservar una buena fisiología renal. Tratar de eliminar los malos hábitos como el alcohol, los cigarros, los excesos de comidas, y ayudarse con comidas ligeramente picantes, utilizar el jengibre como estimulante.

  • Por otro lado, puede aparecer un zumbido fuerte como el ruido de un radio desintonizado, silbidos, ruidos en el interior de los oídos que corresponden a una inversión de la energía del hígado que proyecta mucha sangre en la cabeza y produce estos tipos de resonancias.

Es fundamental relajar nuestra actitud hacia el mundo exterior, tener más paciencia hacia los demás, ser comprensivo, ser muy tolerante con nuestra comunidad porque este año aparece un gran descontento en los seres humanos debido a procesos que son ajenos a nuestra humanidad.

Observar nuestros labios.

Los labios son el reflejo de nuestro sistema digestivo, en particular, la función esplénica.

En personas sanas, los labios son rojos, lo que indica una energía abundante en el estómago y una buena armonía entre la energía y la sangre.

  • Los labios pálidos indican una insuficiencia de sangre o una pérdida de sangre.
  • Los labios rojos obscuros sugieren calor excesivo.
  • Los labios rojos, secos e hinchados indica calor extremo.
  • Los labios rojos como rojo cerezas o rojo cereza brillante indican una intoxicación por monóxido de carbón o algún gas.

  • Los labios azul-morados son signos de estasis de sangre.
  • Los labios azul-negruzcos son el resultado de un frío excesivo o algún dolor intolerable.
  • Los labios secos y agrietados son signos de daño a los líquidos corporales, esta insuficiencia de estos líquidos no permite humedecer a los labios.

  • Las ulceras que aparecen dentro de la boca son llamadas aftas, que son causadas por ataques ascendentes del calor de corazón y bazo.

  • La salivación involuntaria es un signo de deficiencia de bazo y exceso de humedad en niños y un signo de apoplejía en adultos.

  • Cuando se encuentra la boca cerrada con dificultad para abrirla y trismos son comúnmente causados por excitación del viento hepático y contracción de los tendones y canales.