Los diez principios supremos de la conciencia de 太上老君 tài shàng lǎo jūn: máximo viejo soberano supremo

1- 德字诀 dé zì jué: forma de obtener la virtud.

 老子 lǎo zǐ dijo: «La práctica de la virtud debe ser constante. De esta manera, uno regresa a un estado de armonía con la naturaleza». Para encontrar la longevidad y mejorar la salud, es fundamental obtener virtud (virtud: la calidad de nuestras acciones para mejorar nuestra función de vida). Para lograrlo, es importante eliminar nuestros deseos, ser generoso con los demás,  disciplinarse, reconocer nuestros errores y valorar los logros de los demás. Además, no alegar para obtener la razón y menospreciar las opiniones de los otros; no subestimar a los demás para engrandecerse; no presionar ni engañar a las personas para que los procesos se lleven a cabo; no abusar del poder o de nuestra inteligencia para oprimir a los demás; no presumir nuestros talentos ni manipular con astucia; no intimidar a los demás con el poder; no difamar a los demás. Evita promover rumores que puedan dañar la reputación de otros o generar envidias. Utilizar tu trabajo para ganarte la vida sin aprovecharte de los demás, buscar siempre cultivar tu esencia y armonía interior. Recuerda no robar ni engañar por dinero o enriquecerte ilicitamente. Aceptar las dificultades y alegrías con tranquilidad; mantener un corazón benevolente y generoso, cultivar constantemente las buenas acciones; cultivar un corazón bondadoso y constantemente  buscar tu camino. De este modo, recuperarás tu verdadera esencia y comprenderás la naturaleza propia: esta es la verdadera forma de obtener la virtud.

2- 养字诀 yǎng zì jué: principio de la práctica del auto-cultivo.

Dentro de esta práctica es importante hablar poco para mantener nuestro 内气 nèi qì: energía interna, reducir las prácticas sexuales para nutrir 精气jīng qì: esencia vital, modera la ingesta de  alimentos con sabores intensos, preparar tu comida con elementos sencillos para nutrir la sangre, masticar bien tus alimentos para fortalecer la energía de las estructuras anatómicas, evitar la ira para qu e肝气 gān qì: energía del hígado no se desgaste, comer con mesura para nutrir 胃气 wèi qì: energía del estómago, practicar la respiración consciente para nutrir 肺气 fèi qì: energía de los pulmones, reducir las preocupaciones para no gastar 肾气shèn qì: energía de los riñones y ser prudente en tus acciones para nutrir 神气 shén qì: energía espiritual.

3- 心字诀 xīn zì jué: principio de práctica de la conciencia.

Todos los métodos y caminos dependen de la conciencia del ser, la conciencia es el gobernante del ser humano, de la esencia, la energía y el espíritu. Para cultivar la esencia, la energía y el espíritu, uno debe primero eliminar los pensamientos alterados y las emociones perturbadoras. Cuando la mente no se encuentra perturbada entonces se instala el sosiego, lo que permite fusionarse con el origen.

4- 善字诀 shàn zì jué: principio de la bondad.

Cultivar una naturaleza bondadosa o mantener una mente bondadosa, realizar actos de bondad o tratar a los demás con amabilidad, alienta a los demás a practicar esa bondad. Si  hay bondad tanto en el interior como en el exterior, entonces la virtud se manifestará plenamente. Si todos pueden practicar la bondad, el mal desaparecerá, habrá paz y prosperidad en nuestro interior.

5- 无字诀 wú zì jué: principio del no ser.

Ante las circunstancias, no hay circunstancias; en medio del polvo, no hay polvo; al surgir pensamientos, no hay pensamientos; al usar la mente, no hay mente; no hay cielo ni tierra; ni hay yo ni hay otros. La práctica más elevada del daoísmo tiene como objetivo refinar el espíritu hasta regresar al vacío y refinar el vacío para regresar al origen. El logro más elevado del daoísmo, en última instancia, se reduce únicamente a este principio de la no-existencia.

6- 少字诀 shǎo zì jué: principio de la mínima actividad.

Nuestro 精 jīng: esencia vital debe conservarse, 神 shēn: espíritu debe consumirse poco, 气 qì: energía debe mantenerse intacta, la fortuna debe disfrutarse poco, el placer debe buscarse poco. La verdadera virtud florece en la humildad, la abundancia se cultiva con sencillez. Cuanto menos se preocupe uno, conservaremos nuestro 精 jīng: esencia, 气 qì: energía, 神 shēn: espíritu.

7- 静字诀 jìng zì jué: principio de la tranquilidad.

El cuerpo debe estar tranquilo, la mente debe estar sosegada, la energía debe poder circular libremente. Durante la práctica 练功liàn gōng es esencial buscar el sosiego, pero es fundamental mantener ese estado en la vida cotidiana. Durante los momentos de tranquilidad, es natural que encontremos la paz, pero también es importante buscar esa quietud durante la vida diaria, sabiendo que esa serenidad genera orden y sabiduría.

8- 寡字诀 guǎ zì jué: principio de la discreción.

Cultivar 气 qì: energía, quiere decir ahorrar nuestra energía, no hablar demasiado, no distraerse por los órganos de los sentidos para poder cultivar la sabiduría. Si uno elimina los deseos excesivos,  para que no gastar 精 jīng: esencia vital, entonces uno puede cultivar 性 xìng: naturaleza. Tratar de viajar poco o viajar lentamente permite cultivar 神 shēn: espíritu. Moderar los pensamientos y sobretodo eliminar los pensamientos alterados, nos permite aclarar nuestra mente.

9- 淡字诀 dàn zì jué: principio de la indiferencia.

Ser desinterasado ante la fama, no buscar ser el primero, no dejar que los deseos sexuales controlen nuestro organismo, eliminar los apegos, controlar la ira en todas nuestras acciones, nos asegura  alcanzar una meta segura. No permitir que el ego nuble nuestro éxito o nuestra victoria para así tener consciencia de todas nuestras acciones. Cuando el ser humano olvida los apegos, entonces nada puede perturbar su paz. 

10- 忘字诀 wàng zì jué: principio del olvido.

El hecho de olvidar obtener bienes materiales nos permite nutrir nuestra mente. El hecho de controlar nuestras emociones nos permite nutrir nuestro  性 xìng: naturaleza. El hecho de no dejarse levar por las angustias, por las preocupaciones nos permite fortalecer nuestro 神 shēn: espíritu. El hecho de disminuir nuestros deseos sexuales, sensoriales, nos permite conservar nuestro 精 jīng: esencia vital. Si olvido mi propio ser me acerco al vacío, por lo mismo cuando ya no hay nada que olvidar, nada queda sin nutrirse.